FC Barcelona empata con Real Madrid y está en semifinales de la Copa del Rey. Barça 2 - 2 R. Madrid (final)
El Barcelona se ha clasificado para las semifinales de la Copa del Rey tras empatar con el Real Madrid y hacer valer su triunfo en el Bernabéu. Tras una gran primera parte de los de Mourinho, los goles de Pedro y Alves, en los minutos 43 y 47, parecían cerrar el partido. Sin embargo, los blancos empataron con tantos de Cristiano y Benzema, en los minutos 67 y 71, y metieron el miedo al Camp Nou en el mejor partido de los blancos ante el Barça de Guardiola.
Mourinho: "Es imposible ganar en este campo"
El Barcelona sufrió el miércoles como local y empató 2-2 con el Real Madrid para clasificar a las semifinales de la Copa del Rey del fútbol español, en un partido en que el equipo blanco se recuperó de una desventaja de dos goles y tuvo varias opciones para ganar.
El conjunto catalán, que pasó de ronda con un marcador agregado de 4-3, tuvo muchos problemas ante su clásico rival, especialmente en defensa. Pese a que tuvo una mayor posesión de la pelota, los azulgranas se vieron superados en varios pasajes del encuentro jugado en el estadio Camp Nou.
De esta manera, el Madrid no podrá seguir en carrera para revalidar el título obtenido la temporada pasada, cuando en la final venció justamente al Barca.
Pedro, quien había ingresado pocos minutos antes por el lesionado Andrés Iniesta, puso el 1-0 a los 43 minutos al definir una notable jugada individual del argentino Lionel Messi.
El brasileño Daniel Alves marcó el 2-0 a los 45 minutos con un potente remate desde el borde del área que se metió en un ángulo de la valla defendida por Iker Casillas.
En el complemento, el Real Madrid mantuvo su vocación ofensiva pero aprovechó las deficiencias defensivas de su rival, algo que no había logrado en la primera etapa.
Cristiano Ronaldo descontó a los 67 minutos al eludir al arquero rival tras un pase de Mezut Ozil.
Karim Benzema igualó a los 71 tras un sombrero sobre Carles Puyol y una gran definición ante el arquero Pinto.
El Madrid terminó el encuentro con 10 jugadores tras la expulsión del defensor Sergio Ramos.
El Barça se medirá en semifinales con el ganador de la llave que Valencia y Levante definirán el jueves.
Valencia se impuso 4-1 en la ida como local.
En el otro partido del día, el Athletic de Bilbao se metió en semifinales, donde se medirá con el Mirandés de la tercera división, al vencer 1-0 al Real Mallorca como visitante gracias a un error garrafal del arquero Juan Jesús Catalayud.
De esta forma, el equipo del entrenador argentino Marcelo Bielsa cerró la llave con un resultado agregado de 3-0.
Ivan Ramis le dio un pase en apariencia inofensivo a Calatayud a los 76 minutos. Cuando el portero se preparaba para controlar el balón, la pelota botó en el césped y siguió avanzando hasta la portería, poniendo fin a las esperanzas de los mallorquines de repetir su título en la Copa del 2003.
Mirandés eliminó el martes al Espanyol para dar un nuevo paso en su hazaña y meterse en las semifinales del torneo, convirtiéndose en el segundo equipo de esa categoría que lo logra.
BARCELONA, 2 - MADRID, 2
Barcelona: Pinto; Alves, Puyol, Piqué, Abidal; Xavi, Busquets, Iniesta (Pedro, m. 29); Messi, Cesc (Thiago, m. 70) y Alexis (Mascherano, m. 79). No utilizados: Valdés; Adriano, Dos Santos y Cuenca.
Real Madrid: Casillas; Arbeloa, Sergio Ramos, Pepe, Coentrão; Xabi Alonso, Lass (Granero, m. 52); Özil, Kaká (Callejón, m. 61), Cristiano Ronaldo; e Higuaín (Benzema, m. 61). No utilizados: Adán; Carvalho, Marcelo y Albiol.
Goles: 1-0. M. 43. Pedro. 2-0. M. 45. Alves. 2-1. M. 68. Cristiano Ronaldo. 2-2. M. 72. Benzema.
Árbitro: Fernando Teixeira. Expulsó a Sergio Ramos por doble amonestación (m. 88). Mostró tarjeta amarilla a Lass, Messi, Casillas, Ronaldo, Granero, Coentrão, Puyol y Pepe.
Camp Nou. 95.486 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria del exjugador del Barça, Juan Carlos.
MINUTO A MINUTO
El Barça se mete en semifinales después de empatar en la vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey (2-2).
Los azulgrana, que no cuajaron un buen partido, se adelantaron al filo del descanso tras una genialidad de Messi que aprovechó Pedro y tras un zambombazo de Alves a la escuadra.
En la segunda parte, los blancos siguieron mentalizados y la entrada de Benzemá y Callejón por Higuaín y Kaká revolucionó a los madridistas y lograron recortar distancias por medio de Cristiano.
Posteriormente entro Granero y el Madrid siguió con oportunidades, mientras Messi desperdiciaba ocasiones.
Al final, Benzemá se adueñó del balón, hizo un sombrero a Puyol y batió a Pinto. Empate.
(90'+) Amarilla para Pepe por una entrada por detrás a Alves.
(90'+) Amarilla a Granero por una entrada dura. Piqué simula.
(88') A la calle Ramos por ver la segunda amarilla en un salto.
(85') Remate de Cristiano a saque de puerta.
(85') Özil fuerza otro córner.
(83') Disparo de Messi que roza el palo de Casillas.
(81') Gran falta botada por Messi que roza el larguero de Casillas.
(80') Amarilla a Coentrao por una entrada clara a Messi. Se marchó Alexis y entró Mascherano.
(78') Posible penalti de Puyol a Benzemá en una llegada del francés.
(71') ¡¡¡Golazo de Benzemá!!! El Madrid empata el partido de forma increíble con una gran jugada de Benzemá, que supera con un sombrero a Puyol y mete a los blancos en la eliminatoria.
(70') Se marcha Cesc y entra Thiago.
(69') Posible agresión de Pepe sobre Fábregas.
(68') ¡¡¡Gol del Madrid!!! Cristiano regatea a Pinto tras un pase magistral de Özil. El Madrid se mete en el partido.
(63') Remate sin fuerza de Callejón en el segundo palo que acaba en las manos de Pinto.
(59') Entran Benzemá y Callejón por Higuaín y Kaká.
(57') El partido está más igualado pero no hay ocasiones de gol.
(53') Gol que no sube al marcador a favor del Madrid por un agarrón de Ramos sobre Alves. Es claro.
(53') "Nosotros te queremos, Mourinho quédate", canta el Camp Nou.
(51') Mano de Messi.
(49') Disparo de falta de Xavi por encima de Casillas. Se prepara Granero para reemplazar a Lass, amonestado.
(48') El Madrid demuestra seguir igual, pero el Barça parece algo más agresiva.
Comienza la segunda mitad.
Iniesta sufre una pequeña rotura en biceps femoral pierna izquierda.
Después, el Madrid dejó de existir, Lass pudo ser expulsado por una segunda amarilla y Alves despidió la primera mitad con un golazo en el descuento.
(45'+) ¡¡¡Tremendo golazo de Alves!!! Casillas no puede ver el zambombazo sobre la portería escorada.
(45'+) Los jugadores del Barça reclaman la segunda amarilla sobre Lass por una entrada sobre Messi. No se la saca el árbitro y amonesta a Casillas.
(45') Amarilla para Messi por una entrada sobre Pepe.
(42') ¡¡¡Gol de Messi!!! Y se acabó la resistencia del Madrid con un jugadón de Messi que se lleva a tres defensas y abre a Pedro solo por la izquierda para batir a Casillas. Ley de Murphy para los blancos (1-0).
(38') Posible penalti de Abidal por mano en una chilena de Ramos. Dudoso.
(35') Pepe se va al suelo en un encontronazo con Puyol y Piqué en el área antes de que se saque el córner. La repetición indica que se tira claramente.
(34') Primera triuangulación del Barça que acaba en los pies de Alexis y Pepe evita el tanto desviando a córner.
(31') Amarilla a Ramos por una entrada sobre Alves.
(28') Iniesta se marcha lesionado y entra Pedro.
(27') Pinto pierde un balón dentro del área e Higuaín dispara raso sobre el meta gaditano.
(26') Amarilla a Lass por una entrada a Busquets.
(25') ¡¡¡Özil, al larguero!!! Increíble jugada del Madrid que acaba con un disparo potente del alemán al travesaño.
(24') Saque de falta de Messi de rosca a las manos de Casillas.
(20') Disparo lejano de Cristiano que se marcha por encima de la portería de Pinto.
(18') Remate de Pepe en un saque de córner que vuelve a ser saque de esquina.
(16') Mala cesión de Pepe sobre Casillas que obliga a un mal despeje.
(12') El Barça sufre para hacer su fútbol con el Madrid muy arriba.
(10') Parada de Pinto al segundo disparo de Cristiano tras una contra del Madrid.
(7') Disparo de falta de Alves sobre la barrera madridista.
(6') Otro aviso de Cristiano con un disparo con la izquierda que se marcha fuera.
(5') El Barça trata de ganar su espacio y elabora mientras el Madrid corre tras el balón.
(4') Segunda ocasión del Madrid en el saque de la falta que remata Higuaín y repele Pinto.
(4') Mano de Piqué en un centro de Kaká.
(3') Los blancos salen a dominar, con actitud.
(1') Error garrafal de Piqué y disparo fuera de Higuaín delante de Pinto. Increíble fallo.
Arranca el partido. Balón para el Barça.
Se saludan todos, incluidos Messi y Pepe. Minuto de silencio en homenaje a Juan Carlos.
Jugadores en el túnel de vestuarios. Buen ambiente entre ellos.
Gritos de "asesino, asesino" a Pepe en el Camp Nou.
Suplentes: Adán, Carvalho,Marcelo, Benzema, Granero, Albiol y Callejón.
Guardiola repite con el once de la ida: Pinto, Alves, Piqué, Puyol, Abidal, Busquets, Xavi, Iniesta, Cesc, Messi y Alexis.
Los dos equipos ya se encuentran en el estadio azulgrana. Mientras, las gradas se encuentran vacías.
Ahora mismo, los aspersores remojan el césped del Camp Nou.
Apenas cinco minutos para que se cumplan las 21.00 horas de la noche y por el momento no se conocen las alineaciones.
El jefe de prensa de Mourinho, Eládio Paramés, ha señalado en twitter lo siguiente: "Nao sei quem Mourinho vai colocar em campo nem quero saber. So quero q os onze tenham colhoes como meloes! Desculpem a linguagem!!!". Traducción: Viene a pedir que los 11 que salgan esta noche, que aún no lo sabe Mourinho, "tengan cojones como melones".
Guardiola contará con Xavi, Puyol y Cesc casi con toda seguridad, después de darles descanso en el partido de Liga ante el Málaga.
La incógnita del encuentro pasa por saber si Pepe contará para Mourinho en el equipo titular madridista, después de la polémica generada tras el pisotón a Leo Messi y cuya acción finalmente no fue sancionada.
Teixeira Vitienes será el árbitro encargado de arbitrar el encuentro.
Los blancos llegan a la cita con la necesidad de marcar al menos dos tantos en el Camp Nou, después de perder por 1-2 en el encuentro de ida.
(Con información de Juventud Rebelde y 20minutos.es)
Mourinho: "Es imposible ganar en este campo"
Sin querer entrar directamente en polémicas, Mourinho comentó en rueda de prensa que el primer comentario que había escuchado al entrar en el vestuario de su equipo fue que "en este campo es imposible ganar". Repreguntado por si se refería al arbitraje, el técnico del Real Madrid volvió a evitar cualquier tipo de polémica. "Ya jugué aquí con el Chelsea, con el Inter, con el Madrid en Champions. Esta es una situación conocida para mí", se limitó a añadir al respecto.No hay jugador en el Barcelona al que le gusten más los focos que a Alves, que ayer acudió al Camp Nou dispuesto a discutirle el protagonismo al mismísimo Cristiano. Con los flashes centrados en Messi y el portugués, logró un gol extraordinario el brasileño. Un tanto que hubiese podido sentenciar al Madrid porque llegó justo antes del descanso. Una volea embocada con el empeine, imparable para Casillas -"de esas que van para dentro", convino en el entreacto Zubizarreta-, un golazo que pilló a Mourninho camino ya de la caseta. Pero el Madrid es el Madrid, y a pesar del batacazo, se sobrepuso en el segundo tiempo y a punto estuvo incluso de remontar la eliminatoria.
Maldijo el conjunto visitante la fortuna del local, porque con sólo dos disparos entre los tres palos el Barça hizo dos goles. Los blancos, en cambio, disputaron su mejor partido ante el equipo de Guardiola, discutiéndole el balón. Un encuentro al nivel de la vuelta de la Supercopa.
A diferencia de la ida, esta vez Pinto cerró la piernas ante Cristiano y abortó un gol tempranero que, de entrar, probablemente hubiese virado el panorama de la eliminatoria. El astro del Madrid dejó su huella en el Camp Nou con un gol fabuloso, en la segunda parte, a pase de Özil. Además el portugués mostró su habitual pundonor y orgullo.
El Barça, nervioso y apabullado por el Madrid durante muchos minutos, terminó el duelo pidiendo la hora y achicando agua en el área pequeña, donde el colegiado castigó a Sergio Ramos con una falta cuando el sevillano ya cantaba su propio gol. El zaguero del Madrid derribó a Alves en la acción, una jugada ensayada del equipo blanco que también conocía el Barcelona.
Iniesta, lesionado
La peor noticia del encuentro fue la lesión de Iniesta, que tuvo que abandonar el duelo disputado apenas media hora de partido.
Presionado por Arbeloa, recibió Iniesta un golpe del zaguero y en el acto cayó lesionado. Intentó seguir el manchego, pero pronto se dio cuenta de que se había lastimado. El de Fuentealbilla mostró un gesto nervioso -se tocaba el brazo como si expulsara pedacitos de césped- mientras se confesaba con el doctor. Experto en estos lances, Iniesta detectó al instante que se había roto. Sufre el volante una rotura de fibras en la parte posterior del muslo de la pierna izquierda, justo donde se lesionó antes de las vacaciones navideñas. De momento, parece una lesión pequeña.(Público.es)
El clásico, todo un circo romano
Definitivamente, los clásicos transforman a sus protagonistas. Sólo un Barça-Madrid es capaz de convertir el Camp Nou en una suerte de coliseo romano, como si el césped fuera arena y, sobre él, se batieran gladiadores con leones, azuzados por una masa ávida de espectáculo. Lo fue ayer la hinchada azulgrana, más jaranera y cantarina que nunca, un auténtico coro de animación y condena, que se arrancó entonando a capella el himno del Barça, al tiempo que desplegaba un enorme mosaico azulgrana y unos fuegos de artificio inauguraban el show. Cargados de razones futbolísticas, que son y fueron muchas, los aficionados del Barça acudieron al estadio con un extra de motivos colaterales, el cóctel perfecto para hacer del partido un escenario de reivindicaciones. Es lo que tiene vivir en un país que, en cuestiones judiciales, recupera la pandereta con una frecuencia alarmantemente inusitada.
Como quiera que el juez único de Competición, Alfredo Flórez, no contento con no entrar de oficio a sancionar el alevoso pisotón de Pepe sobre Messi en la ida, se mofó de su propia inhibición "habría actuado si a Messi le hubieran amputado dos dedos", se justificó, según afirmó la emisora Ona FM, la afición del Barça redobló sus razones para cargar contra Pepe. Retador, como acostumbra, José Mourinho tampoco le ahorró el escarnio a su jugador. La parroquia culé se frotó las manos cuando lo vio en el once titular. Y, a cada intervención del defensa madridista, se arrancó con un sonoro y contundente: "¡Asesino, asesino!". La condena popular no pareció incomodar al portugués, un reincidente irredento. Tras dejar unas cuantas entradas con su marca registrada y teatralizar un par de caídas, cual candidato al Oscar la segunda, provocada por Messi, le supuso la tarjeta amarilla al argentino, Pepe le arreó un manotazo en la cara a Cesc.
"Todo el mundo sabe quién es la víctima y quién el agresor. El modelo aquí no es tan razonable como el de la Bundesliga y la Premier, que es capaz de entrar de oficio en estas ocasiones", apuntó el vicepresidente del Barça, Carles Vilarrubí. En consecuencia, un socio azulgrana de origen alemán ha decidido llevar el pisotón de Pepe a la Justicia ordinaria. Las opciones de que el caso prospere, en un juzgado de Barcelona, se antojan más que remotas. Por eso sus compañeros de grada se dieron por satisfechos ayer con la buena actuación del coreado Pinto, el tanto de Pedro, todo un alivio, y el golazo de Alves, que arrancó un "¡olé!" de Pep Guardiola y un baile del propio brasileño con Abidal.
Eufórica con el resultado, sin sospechar que el Madrid tendría capacidad para empatar a dos, la grada se acordó de su amigo Mou. "¡Nosotros te queremos, Mourinho quédate!", le declaró, con hiriente ironía. Luego, sorprendida, se tragó el gol de Cristiano. Y, con el corazón encogido, el de Benzema. Y así, cantando y condenando, resistió hasta celebrar la clasificación final. El clásico, todo un circo romano, vaya.(Público.es)
El peor Barça elimina al mejor Madrid
A menudo hay que tocar fondo para tomar impulso y remontar el vuelo, hacer de la necesidad virtud, también en el Madrid. Pocos equipos han hecho más el ridículo que el de Mourinho, protagonista de una antología del disparate en la serie del clásico, personificado en Pepe. El mérito blanco ha sido pedir día y hora para la revancha cada vez que ha sido abatido por el Barça y corregirse hasta completar una excelente actuación. Aunque ayer tampoco le alcanzó para ganar, al menos le valió para reivindicar su fútbol y merecer un mejor resultado en el Camp Nou.
Ocurrió que anoche, durante un buen rato, el Madrid se pareció tanto al mejor Barcelona como el Barça al peor Real. Los papeles se intercambiaron y, sin embargo, el resultado cayó nuevamente del bando azulgrana, más efectivo y afortunado, favorecido casi siempre en las muchas jugadas dudosas. Teixeira pitó mal para los dos equipos, y sobre todo para el Madrid. Ambos compitieron de forma temible porque, de alguna manera, ninguno tenía nada que perder: el Madrid porque ya lo había perdido todo y el Barça porque entendió malamente que lo que tiene lo tendrá para siempre.
Al Barça le convenía un partido tranquilo, como si no conociera a Pepe, ni supiera nada de Mourinho, ni mucho menos se hubiera jugado la ida en el Bernabéu. No quería mirar al marcador ni especular con el gol de ventaja de Madrid. Apelaba al control emocional ante una hinchada irritada por la presencia del indultado Pepe. Quiso ser tan pacífico que al final se convirtió en un equipo inanimado e hipotenso, extremadamente vulnerable. Los mismos jugadores que triunfaron en Chamartín fueron desbordados durante un tiempo por la determinación del Madrid.
La gracia del Madrid está en su capacidad para llevar la contraria y en su rebeldía, en el atrevimiento de su técnico para poner a Pepe, ayer reubicado como zaguero, su puesto natural, circunstancia que ayudó a equilibrar su juego. Hoy es un equipo furioso y colérico, dado al arrebato, extremadamente ruidoso, sorprendido también por su desdicha ante el Barcelona. Anoche completó media hora de juego estupenda, coronada por un rosario de oportunidades, y sin embargo se retiró al descanso con dos goles en contra en las dos únicas oportunidades que concedió.
Al Madrid le interesaba un partido tenso y revolucionado, nada de perder el tiempo. Hecho una furia, atacó y presionó y si no cazó el gol nada más salir de centro fue porque Higuaín no atinó en el remate después de una mala cesión de Alves, peor acompañada por Piqué. La superioridad del Madrid era manifiesta por la zancada de Kaká, la visión de juego de Özil y el gatillo de Ronaldo. Incomodado y sometido, el Barça iba y venía al ritmo del Madrid, demasiados apresurados los azulgrana, faltos de control y de pausa, poco reconocibles, muchas veces sin balón.
El juego se centró en la cancha azulgrana, las llegadas eran blancas y hasta Pepe provocó un penalti por manos de Busquets que el árbitro no vio o no concedió. La suerte estuvo siempre de parte del Barcelona. Özil, por ejemplo, remató a la escuadra e Higuiaín volvió a marrar el tiro ante Pinto, siempre sorprendente, a veces excelente y en otras patoso. El problema azulgrana, sin embargo, no estaba en la portería sino en la medular, porque no mezclaban bien Xavi, Iniesta y Cesc. Al rescate tuvo que acudir de nuevo Messi, desequilibrante en la conducción y en el regate.
Lesionado Iniesta, al Barça le vino bien la entrada de Pedro y el alboroto que creó con Messi. La Pulga arrambló con la pelota rebanada por Alves a Ronaldo en una acción discutida y la aguantó hasta que la defensa blanca acudió en tropel a su encuentro y propició la asistencia del argentino para Pedro. El gol encendió a los barcelonistas, sorprendentemente a gusto con el ardor que tomó el partido, muy incendiario. Terreno abonado para Alves, que cruzó un remate excelente desde el pico del área después de una falta botada por Xavi y rechazada por Lass.
Al Madrid, en cualquier caso, no se le pasaron las ganas de jugar a fútbol, ni siquiera cuando el Barcelona parecía más asentado y tenía a buen recaudo el partido y también la clasificación. El futbol devolvió al Madrid en un momento, ya con Benzemá y el pelotón de centrocampistas en la cancha, lo que le había negado durante mucho rato. Özil habilitó a Ronaldo, que sorteó a Pinto con un soberbio regate largo, sin tocar la pelota, para embocar a gol, y poco después Benzema aprovechó un error de Piqué para empatar: 2-2. El Madrid tenía la ambición que le faltaba al Barcelona.
Alimentado por un excelso Özil, el Madrid encontró en las jugadas episódicas la fortuna que no tuvo cuando dominó el fútbol ante un desquiciado Barça, mal puesto porque no daba con Xavi y no entraba en juego Messi. Fieles a su mensaje apocalíptico, los chicos de Mou se dejaron la vida, murieron en el campo, obligaron a la afición azulgrana a abrigar a su equipo hasta que se acabó el partido por orden de un árbitro que acabó por expulsar a Ramos, el mismo al que le había anulado un gol en la salida de un córner, y obvió después un empujón a Benzema frente a Pinto.
Muy valiente, al Madrid le explotó el corazón de tanta rabia como le dio perder el partido y no se retiró de la cancha hasta rodear a Teixeira Vitienes después de un final tremendo, agrandado por el dramatismo que siempre proporciona la Copa. Aguantó el Barcelona como un jabato, convencido de que la astrología, los dioses del fútbol y la ventura estaban anoche de su parte y en contra del Madrid, que no encuentra el punto de inflexión en los clásicos ni cuando se parece más que nunca al mejor Barça. A pesar de que Guardiola continúa invicto y Mourinho sigue sin ganar en el Camp Nou, jugaron mal ayer los azulgrana y bien los blancos. La suerte le dio anoche la espalda a Mourinho. A cambio, sin embargo, igual le enseñó el plan para combatir al Barça, semifinalista de Copa.(RAMON BESA - Barcelona- Elpais.com)
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