Advierten que contacto con excrementos de palomas y otras aves puede representar riesgos para la salud
Por su interés y los comentarios populares que generan estas enfermedades; por el aumento de la cría de palomas en zonas urbanas de Santa Clara; por la irrupción de estas aves en plazas públicas de La Habana, y por las dudas que siempre genera este tipo de padecimientos, Tele y Radio reproduce íntegramente esta entrevista que publica hoy el diario Granma, firmada por nuestro profesor José Antonio de la Osa en la sección Consulta Médica.
Enfermedades de la paloma JOSÉ A. DE LA OSA En la actualidad los especialistas advierten que estar en contacto con los excrementos de palomas y otras aves puede representar riesgos para la salud. La ciencia conoce que tres enfermedades humanas están asociadas a estos residuos metabólicos: la criptococosis, la histoplasmosis y la psitacosis.
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Doctora Liz Leysa Ortega Márquez.
"Como denominador común esas enfermedades son zoonosis, es decir: enfermedades trasmitidas por los animales a los seres humanos", observa la doctora Liz Leysa Ortega Márquez, especialista de segundo grado en Neurología y en Medicina Intensiva y de Emergencia, quien se desempeña en la Unidad de Cuidados Intensivos del Instituto de Neurología y Neurocirugía, radicado en La Habana.
La criptococosis y la histoplasmosis, indica, son infecciones micóticas producidas por los hongos Cryptoccoccus neoforman y el Histoplasma capsulatum, respectivamente, mientras que la psitacosis es la infección causada por la bacteria Chlamydia psittaci. En cuanto al reservorio natural todos estos microorganismos pueden encontrarse en las heces de las aves tanto domésticas como salvajes.
Las excretas contaminadas de las palomas trasmiten las tres afecciones, aunque la criptococosis es la más frecuente. De ahí su denominación popular de "enfermedad de las palomas". En la histoplasmosis el guano de murciélago es, además, una fuente de infección fundamental, por lo que se conoce como enfermedad de los espeleólogos o de las cuevas; y a la psitacosis se le llama enfermedad del loro o del perico por ser estas aves las más relacionadas con la entidad.
—¿Podrían calificarse esos agentes como altamente contagiosos?
—Realmente no, pues dependen en gran media de la competencia inmunológica de cada persona o de la dosis infectante a que se expone, más que de la virulencia propia de esos agentes. Las defensas bajas de nuestro organismo son las que nos hacen más susceptibles.
—¿Se conoce si es alta o baja su incidencia en Cuba?
— Es baja, aunque en los últimos años se ha producido un incremento en pacientes con sida, tuberculosis y trasplantados.
—¿El contagio de estas tres zoonosis siguen un mismo patrón para la infección?
— Sí. La inhalación de las excretas contaminadas produce las tres enfermedades. La criptococosis puede trasmitirse asimismo si el hongo entra en contacto con la piel y mucosas lesionadas; y en el caso de la psitacosis no solo las deposiciones infestadas originan esta dolencia, sino también las secreciones nasales, tejidos o plumas contaminadas.
—¿Y en cuanto a las manifestaciones clínicas?
—En los humanos la mayoría de las enfermedades provenientes de las aves transitan de forma asintomática o autolimitada. En ocasiones se presentan cuadros infecciosos de gravedad. En las tres entidades que nos ocupan las manifestaciones infecciosas pulmonares dan inicio al cuadro clínico. En la criptococosis el agente causal se disemina por la sangre, originando lesiones en distintas estructuras del cuerpo y, en especial, afecta el Sistema Nervioso Central (SNC). De igual manera, en la histoplasmosis se produce la inflamación de ganglios, hígado, bazo y otras estructuras. Y en la psitacosis se afecta el hígado, el bazo, el SNC y el corazón.
—¿Por la variedad o similitud de los síntomas pudieran ofrecer dificultades para el establecimiento del diagnóstico de certeza?
—Ciertamente. En ocasiones se comportan como una gripe trivial o pudieran confundirse con otras dolencias sistémicas graves. Por ello es esencial tener en cuenta el ámbito epidemiológico: si el dueño de un ave, o persona en contacto con ella, tiene síntomas persistentes o inusuales de infección, o si el pájaro ha enfermado o muerto.
—¿Estas zoonosis tienen tratamiento específico?
—En el arsenal terapéutico existen fármacos antifúngicos (contra los hongos) de gran efectividad, útiles para tratar la histoplasmosis y la criptococosis. La psitacosis, por ser una infección bacteriana, debe ser tratada con antibióticos.
—¿Estas enfermedades se trasmiten de persona a persona?
—En la literatura médica existen reportes de trasmisión de la psitacosis entre humanos, no así en cuanto a la histoplasmosis y la criptococosis.
—¿Qué controles higiénico-sanitarios deben ser adoptados para prevenir estas enfermedades?
— Se debe evitar, en lo posible, la cría de palomas en zonas urbanas, sobre todo grandes asentamientos de aves donde existan concentraciones poblacionales y realizar la limpieza adecuada de los sitios de cría para impedir la diseminación de las heces. Para el propietario de un pájaro, la prevención comprende la higiene, el saneamiento y la consulta periódica al veterinario. No desalentamos la tenencia de aves como mascotas, sino alertamos la responsabilidad que se asume en la prevención y control de estas y otras zoonosis trasmitidas por aves.
TOMADO DE GRANMA
DISPONIBLE EN
http://www.granma.cubaweb.cu/salud/consultas/p/c31.html
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